El tejido empresarial catalán tiene un papel relevante con la nueva ley de la formación profesional (FP): se convierte en agente activo de la formación y la capacitación de las personas. El motivo es que la nueva ley establece que toda la formación tendrá carácter dual .

Por este motivo, es importante que el tejido productivo catalán, muy especialmente las pequeñas y medianas empresas, se involucren en la nueva FP. Se calcula que se necesitan más de 60.000 empresas que ofrezcan prácticas formativas. Su participación y disposición a acoger alumnos para realizar estas prácticas les ayudará a tener los perfiles profesionales necesarios en cada momento para garantizar su competitividad.

Y es que la formación en un entorno real garantiza una rápida adaptación, flexibilidad, polivalencia y transversalidad que dota al alumnado de experiencia laboral para lograr su inserción laboral.

Beneficios para las empresas

Algunas de las ganancias que pueden tener las empresas si acogen a alumnos en prácticas son:

Incorporar nuevo talento es una potente estrategia de reclutamiento para preseleccionar a nuevos profesionales.

Se incrementa el sentido de pertenencia y el compromiso de los trabajadores y trabajadoras con la empresa.

Se favorece el intercambio generacional en el interior de las empresas.

Aumenta el atractivo de la empresa para potenciales trabajadores.

Las empresas pueden establecer contacto directo con los centros de formación del sector.

Colaboración en el currículum formativo de una persona o grupo de personas.

Aproximación y conocimiento de las formaciones y programas que se ofrecen en el marco de la formación profesional.

Visibilidad de la sensibilidad social de la empresa y mejora de su reputación.

Satisfacción de ayudar a una persona o grupo de personas en su formación profesional.

¿Cómo ser empresa colaboradora?

El procedimiento es muy sencillo: la empresa debe ponerse en contacto con el Área de Servicios a las Empresas del Servicio Público de Empleo de Cataluña (SOC) a través del buzón serveisempresa.soc@gencat.cat . Los equipos territoriales del SOC informarán a la empresa de los centros que imparten la formación que le interesa para que se ponga en contacto y se ofrezca como empresa interesada en acoger alumnos en prácticas.

Esta experiencia tiene multitud de beneficios tanto para empresas como para alumnos. Algunos de éstos son:

Adquirir competencias profesionales propias de cada oferta formativa.

Conocer la realidad del entorno laboral del sector productivo o de servicios de referencia que permita la adopción de decisiones sobre futuros itinerarios formativos y profesionales.

Participar en el desarrollo de una identidad profesional emprendedora y motivadora para el aprendizaje a lo largo de la vida y adaptación a los cambios en los sectores productivos o de servicios.

Adquirir habilidades permanentes vinculadas a la profesión que requieran situaciones reales de trabajo.

Facilitar una experiencia de inserción y relacional en una plantilla real de profesionales, de acuerdo a la normativa de prevención de riesgos laborales.

Las prácticas, para consolidar conocimientos

Damaris, María Fernanda y Moussa son los tres protagonistas de esta campaña. Tres vidas diferentes y todas ellas con un denominador común: estudiaron un certificado profesional, realizaron prácticas en una empresa y han conseguido un trabajo gracias a Ramon, Loredana y Jordi.

A través de su vivencia y experiencia por parte de la empresa, conoceremos la oportunidad que ha supuesto para ellos esta experiencia que, en definitiva, sirve para construir un mercado laboral más fuerte, profesionalizado y robusto.

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Fuente: SOC