La vicepresidenta de Trabajo Yolanda Díaz ha denunciado este jueves en Barcelona el fracaso del contrato de formación en España. En su intervención en la XXXVI Reunión del Círculo de Economía en Barcelona ha asegurado que "nuestro país tiene un contrato de formación semejante al alemán. Se han formalizado tan solo 8.000 contratos de formación, y son contratos de calidad y que tiene un tutor. Las empresas no acuden a esta modalidad porque tenemos una pluralidad de posibilidades. Hay que cambiar las normas, pero también el modelo productivo, porque la cultura de la precariedad y la temporalidad está grabada a fuego. Las empresas que tienen trabajadores precarios son empresas precarias que no tienen futuro".
Según la ministra de Trabajo, "el problema del empleo en España no es solo de formación. Tiene que haber un pacto contra la precariedad y un pacto por el empleo de los jóvenes".
Yolanda Díaz ha reflexionado sobre la situación laboral en España asegurando que "tenemos una tasa de paro estructural insoportable, hemos llegado al 26% en el final de la pandemia y una tasa de desempleo juvenil del 38% y desde los años 80 hasta hoy estamos en una horquilla que es imposible. Este es el enorme problema de nuestro país. ¿Qué hemos hecho mal? Y la pregunta la hago yo ejerciendo de gallega". La raíz del problema, a juicio de la vicepresidenta, es que “desde el inicio de la democracia llevamos 52 reformas laborales. Y todas en la misma dirección. Solo funcionó la del año 1997, que se bajaron un poco las cifras. Tenemos que garantizar reformas estructurales para garantizar estabilidad en el empleo”.
"Tiene que haber temporalidad, sí. Pero debe de estar justificada".
En opinión de Díaz, "la reforma ha de estar en contacto con las autoridades locales para adaptar el empleo a lo que necesita cada sitio. Hay que garantizar la estabilidad en el empleo. Y tiene que haber temporalidad, sí. Pero debe de estar justificada".
"Nuestro modelo productivo está muy volcado en los servicios y estamos centrados en el sector servicios básico, y eso nos debilita. Y, de la mano del sector servicios, la construcción. Por eso necesitamos aprovechar el impulso del plan de recuperación para que los diferenciales de productividad con Europa no sigan siendo negativos", ha lamentado la ministra en este foro económico.
Productividad por los suelos
La ministra ha puesto sobre la mesa que "el problema es que se nos desploma la productividad. Y hay que mejorar, la formación, el mercado de trabajo para que haya más empleo de calidad y apostar por la inversión en I+D+i".
Para el secretario general del UGT, José María Álvarez, "el debate sobre la productividad puede convertirse en un mantra. No sé cómo combina eso con la congelación del SMI (salario mínimo interprofesional). Los salarios bajos no son un elemento que ayude a la reforma de la productividad".
"España, en términos industriales, no está tan mal en productividad. Es el sector servicios el que nos hace caer en productividad. Y no estoy hablando solo del turismo, sino del sector de servicios primarios", ha matizado este líder sindical.