- La ministra de Educación y Formación Profesional ha presentado hoy los componentes del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia correspondientes a su departamento.
- Casi 1.500 millones se destinarán a digitalización; 2.075 millones a Formación Profesional y 1.115 a la modernización con equidad del sistema educativo.
- Celaá afirma que la Educación y la Formación Profesional se consolidan como eje vertebrador de la recuperación económica en todo el mundo.
La ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, ha presentado hoy las principales líneas de inversión del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia que corresponden a su departamento y que alcanzan los 4.687 millones de euros.
Con esta inversión, centrada en la digitalización, el impulso a la Formación Profesional y la modernización con equidad del sistema educativo, el departamento dirigido por Celaá apuesta con firmeza por la educación como herramienta para la recuperación de la economía del país.
“La educación es el principal motor económico. Está en el centro de las estrategias para la recuperación, como queda reflejado en los diferentes planes de estímulo económico para superar la crisis provocada por la pandemia, tanto en Europa como en EEUU”, ha asegurado Celaá.
“La profunda reforma del sistema educativo que emprendimos hace tres años se verá definitivamente impulsada con el Plan Recuperación, Transformación y Resiliencia”, ha concluido la ministra.
Las inversiones y reformas del Ministerio de Educación y Formación Profesional (MEFP) se incluyen en los componentes 19, 20 y 21 de este Plan.
El primero de ellos permitirá la transformación digital del sistema educativo con una inversión total de 1.496 millones de euros.
De ellos, 827 millones serán para la instalación y mantenimiento de más de 240.000 aulas digitales interactivas en 3 años; 301 millones para la formación en competencia digital de más de 700.000 docentes; 150 millones para 300.000 dispositivos destinados a reducir la brecha digital entre el alumnado; 110 millones para el Plan FP Digital; 19 millones para la capacitación docente en el uso de las aulas digitales interactivas y 4,8 millones para la mejora de los sistemas de información de Ceuta y Melilla. Otros 84 millones irán destinados a la Red de Centros Nacionales de capacitación digital.
Ciclos formativos de grado medio y grado superior bilingües
Por otra parte, el componente 20 se centra en el desarrollo e impulso a la Formación Profesional, con una inversión total de 2.075,4 millones de euros. Con ello, se avanza en la consolidación de un sistema de Formación Profesional unificado, que incluye la FP del sistema educativo y la FP para el empleo, y convierte estas enseñanzas en clave de una economía sostenible, capaz de adaptarse a las transformaciones del sector productivo y mantener la competitividad de los trabajadores.
Los 2.075,4 millones de euros destinados a la Formación Profesional se distribuye, entre otros, en 724,6 millones de euros para la acreditación de competencias profesionales adquiridas a través de la experiencia laboral de tres millones de personas; 394,78 millones para la formación modular de 700.000 trabajadores ocupados y desempleados; 200 millones para la creación de una red de 50 centros de excelencia; 300 millones de euros para la conversión de 3.700 ciclos formativos de grado medio y grado superior en bilingües; 254 millones para la creación de 135.000 plazas de FP; 9 millones para la puesta en marcha de Aulas Mentor en 2.250 municipios rurales y 2,5 millones para la formación digital y verde de 20.000 docentes de FP, aplicada a los sectores productivos.
Lucha contra el abandono escolar y la segregación
Por último, el componente 21, Modernización con equidad del sistema educativo, incluye una inversión de 1.115,6 millones de euros. Incorpora medidas destinadas a luchar contra el abandono escolar temprano, mejorar los resultados educativos y fomentar la equidad y la calidad del sistema educativo.
Esta inversión permitirá la creación de más de 60.000 plazas de primer ciclo de infantil de titularidad pública para extender la escolarización de este ciclo y compensar los efectos de las desigualdades de origen socioeconómico (670,9 millones de euros); la implantación en unos 2.500 centros del programa de apoyo #PROA+ (320 millones de euros); y la creación de al menos 1.000 unidades de acompañamiento y orientación personal y familiar del alumnado con dificultades (124,71 millones).
Con estas iniciativas se avanza hacia un modelo personalizado, inclusivo y flexible del aprendizaje, que se adapta a las necesidades de cada alumno y alumna.
La planificación y ejecución de estas inversiones se harán fundamentalmente con las comunidades autónomas mediante programas de cooperación territorial que serán acordados y aprobados en las conferencias sectoriales.