-´La mayor parte se ha destinado a la formación de trabajadores, la acreditación de competencias y la creación de más de 88.000 nuevas plazas de FP.
- Además, ha impulsado la creación de la Red de Centros de Excelencia de FP y la Red de Centros de Capacitación Digital.
- Por otro lado, el Ministerio sigue trabajando en el fortalecimiento de la equidad del sistema educativo apostando por las becas, la escolarización temprana y el apoyo y refuerzo a los estudiantes.
El Ministerio de Educación y Formación Profesional avanza en el cumplimiento de sus compromisos al término de un año clave para la nueva FP. En 2022, el Gobierno ha invertido en su transformación más de 1.700 millones de euros, destinados, entre otras actuaciones, a la creación de nuevas plazas o la formación de trabajadores empleados y desempleados.
El avance en la transformación de la Formación Profesional ha estado marcado este año por la aprobación de la Ley de Ordenación e Integración de la FP en el mes de marzo, en cuyo desarrollo se encuentra inmerso el Ministerio junto con las comunidades autónomas y los principales agentes del sector.
En paralelo, el Gobierno ha consolidado su apuesta por la FP como catalizadora del cambio económico y social a través de la financiación, que ha superado los 1.700 millones de euros en este ejercicio. La mayor parte de esta inversión (más de mil millones) se ha destinado a la formación de trabajadores, empleados y desempleados, a través, fundamentalmente, de las comunidades autónomas.
Otra de las prioridades en materia de FP es aumentar el número de plazas. En 2022, el Ministerio ha financiado la creación de más de 88.000 plazas a las comunidades autónomas, que se suman a las más de 122.000 creadas desde 2020.
A estas actuaciones hay que añadir la creación de la Red de Centros de Excelencia de Formación Profesional repartidos por el territorio, a la que se han destinado 41,6 millones de euros; la Red de Centros de Capacitación Digital, con 29,5 millones de inversión; la creación y mantenimiento de las Aulas Mentor (dos millones de euros) para la formación de trabajadores en zonas rurales; o el impulso a la acreditación de competencias profesionales, gracias a casi 180 millones de euros de inversión.
Además, continúa la tarea de actualización y modernización de las titulaciones con la creación o actualización de casi 120 cualificaciones profesionales, la creación de cinco cursos de especialización y varios certificados de profesionalidad, en su gran mayoría conectados con sectores con alta demanda de empleo.
Fortalecer la equidad del sistema educativo
Por otro lado, en 2022 se ha dado respuesta a una de las reclamaciones históricas de los estudiantes con el adelanto de cuatro meses de la convocatoria de becas. Esto ha permitido que los estudiantes supieran antes del inicio del curso si cumplían con los requisitos económicos para recibir estas ayudas, reduciendo así su incertidumbre. Además, gracias también al incremento presupuestario, la gestión se ha agilizado y más de 650.000 estudiantes han cobrado ya su beca, un 50% más que en el mismo periodo del año pasado.
La política de becas es una de las prioridades del Ministerio y una de las herramientas principales para fortalecer la equidad del sistema educativo. A ella se suman los programas de apoyo y refuerzo como PROA+, que está implementado en 3.700 centros de todo el país y al que este año se han destinado más de 118 millones de euros.
En la misma línea se sitúa el impulso a la escolarización temprana, que contribuye además a mejorar la conciliación de las familias y, especialmente, de las mujeres. Para ello, el Gobierno ha distribuido este año a las comunidades autónomas 331 millones de euros, que forman parte de un programa a tres años con una inversión total de 670,1 millones para la creación de más de 65.000 plazas públicas y gratuitas del primer ciclo de Educación Infantil (0 a 3 años).
Por último, este año se ha empezado a implantar el Plan Código Escuela 4.0 en el segundo ciclo de Infantil y en Primaria. El objetivo de este programa, que se extenderá a los alumnos y alumnas de Secundaria y que cuenta con un presupuesto de 356 millones de euros en dos años, es que los estudiantes se formen en pensamiento computacional, programación y robótica.