La Consejería de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo ha acordado con los agentes sociales y económicos el diseño de una metodología para detectar las necesidades formativas en cada provincia andaluza para así poder adecuar la oferta formativa a la empleabilidad de las personas trabajadoras y a la productividad y competitividad de las empresas en cada territorio.
El delegado territorial de Empleo, Formación, Trabajo Autónomo, Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades, Emilio Ortiz López, ha recordado que “esta pionera metodología de trabajo tiene su germen en el éxito que han tenido las mesas sectoriales ‘Binomio Formación-Empleo’ puestas en marcha para diseñar una oferta formativa de FPE más adaptada a las necesidades reales de nuestra provincia y por tanto más eficaz”, en las que han colaborado el SAE y agentes sociales y económicos y del mundo de la formación profesional para el empleo de Almería.
Como resultado de estos trabajos se elaborará un Estudio de Necesidades Formativas en Andalucía que permitirá conocer las demandas de cualificación de los profesionales en los diversos sectores de cada territorio. Para su elaboración, se ha preparado una ‘Guía Metodológica para el Estudio de Necesidades Formativas para la Planificación de la FPE’, que servirá de base documental para los diferentes equipos de trabajo a nivel regional y provincial.Llamamiento a la participación
Emilio Ortiz ha hecho “un llamamiento a la participación del empresariado y de los agentes económicos y sociales de Almería en esta metodología de trabajo”, que se articulará con un grupo de Consultoría Territorial que se creará próximamente, compuesto por personal técnico de la Delegación Territorial y por representantes de entidades externas y vinculadas con la formación y el empleo, que darán cobertura y apoyo directo a un equipo de trabajo provincial en la aportación y obtención de información sectorial y territorial, confirmación de resultados obtenidos, etc.
Además, entre otros canales de escucha activa, la Consejería de Empleo está diseñando una serie de cuestionarios que permitirán recoger una respuesta cercana a la situación actual del mercado de trabajo y las cualificaciones requeridas para su contratación.
Ortiz López ha recordado que la actual programación de acciones de Formación Profesional para el Empleo en Almería está compuesta por 231 cursos en los que podrán participar casi 3.500 personas desempleadas y ocupadas, con una inversión por parte de la Consejería de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo de 4,11 millones de euros.
En Almería se ha constituido ya un equipo de coordinación integrado por siete personas, personal técnico que está en contacto con el tejido empresarial y formativo almeriense, procedentes del Servicio de Formación de la Delegación Territorial, el Servicio Andaluz de Empleo en Almería, la Escuela del Mármol y la red provincial de Andalucía Emprende.
Este equipo se encarga de realizar los trabajos de prospección y análisis del actual mercado de trabajo almeriense y su dinámica (mediante estudios documentales, análisis de datos, cuestionarios, entrevistas, etc.), y de validar los resultados y propuestas de respuestas formativas adecuadas a los sectores económicos estudiados y a los territorios de cada provincia.
Por otra parte, a nivel regional hay un equipo de Estudio de Necesidades Formativas responsable de elaborar el procedimiento del estudio y de apoyar su ejecución en cada una de las provincias con instrucciones, instrumentos e información previa.
Estudio final de los trabajos
Los resultados de estos equipos de trabajo siguiendo la metodología de trabajo, darán lugar a un estudio final, que permitirá tener una visión general de los sectores productivos más representativos de Andalucía y de cada provincia y detectar sus necesidades formativas y las ocupaciones más representativas reconociendo su correspondencia con el catálogo de especialidades formativas.
De este modo, el estudio servirá de base para proponer y priorizar respuestas formativas a corto y medio plazo, adaptándolas a los requerimientos de las empresas, a los perfiles de las personas trabajadoras, todo ello ajustado a la disponibilidad presupuestaria de la Consejería y a los recursos de formación disponibles.